Observación astronómica
Ayer por la noche estuve en una observación astronómica para aficionados dirigida por la Asociación Astronómica de Cuenca y celebrada en el Parque Arqueológico de Carranque (Toledo). Allí, además de las maravillas celestes que pudimos contemplar, aproveché para visitar varias de las edificaciones romanas del parque, de las que tomé algunas fotos. Éstas, en concreto, son de la Casa de Materno:
Casa de Materno |
Casa de Materno |
Lo disfruté, claro, aunque debo confesar que mi visita fue demasiado rápida para poder leer todos los carteles explicativos y observar detenidamente los mosaicos y distribución de las distintas salas. Lo cierto es que me moría de ganas por salir y volver junto a los telescopios y la pantalla donde fueron proyectándose diapositivas explicadas una a una en lo que se convirtió en una larguísima e interesantísima conferencia. Éstos son los objetos que pudimos contemplar:
Además, me obsequiaron con algunas fotos increíbles. No las he escaneado todas, pero sí unas cuantas que os muestro a continuación:
Éstas muestran las increíbles protuberancias solares. Alucinante la comparación no ya del Sol con la Tierra, sino de las propias protuberancias con nuestro planeta:
Protuberancias solares |
Protuberancias solares |
Obviamente, no vimos el Sol ni estas protuberancias porque la observación fue nocturna, pero sí nos hablaron de las posibles consecuencias de una terrible tormenta solar, sobre las cuales yo ya había leído hace tiempo, lectura que, por cierto, en su momento me sugirió una idea para una de mis historietas de ciencia ficción que ya, por desgracia, he olvidado.
También me regalaron esta otra foto, que muestra la Vía Láctea vista desde el Sur:
Vía Láctea |
No se puede negar que la foto es una preciosidad, sin embargo, jamás he visto la Vía Láctea tan, tan, tan bonita y esplendorosa como se muestra, al natural, en el cielo estrellado de Extremadura.
Pues ésta fue, amigos, la manera en que decidí comenzar mis vacaciones. Lo pasé en grande, disfruté muchísimo y sólo tengo un pero: los niños. Hubo muchos padres que decidieron llevar a sus hijos para que también ellos disfrutaran, el problema es que la observación astronómica no estaba diseñada para infantes, sino para adultos, con lo cual los niños se aburrieron bastante y dieron la lata de un modo insufrible. Perdí muchos datos de la conferencia porque a mi alrededor sólo se oían cosas del tipo: Mamá, tengo sed. Mamá, me hago pis. Mamá, me aburro. Buuuuaaaaaaa. Quiero irme, etc. Y eso no es lo peor. Lo peor, peor fue el grupo de niños que se pusieron a correr, saltar y berrear junto al lugar donde se daba la conferencia (incluso pasaban por donde estaba todo el nudo de cables que conectaba uno de los telescopios con el proyector y los arrancaron un par de veces). A pesar de las advertencias del conferenciante, los padres no parecieron darse por aludidos y no vi a más de uno o dos que llamara la atención a su hijo. El resto, qué a gusto estaba a su santa bola. Ay, cómo me acordé de ti..., Herodes...
11 comentarios:
Veo que empezaste bien las vacaciones.
Y toda una atención tuya con el resto de los asistentes que fueron a ver las maravillas del Universo, presentándote ante ellos ;-)
P.S.Entiendo que, en realidad, el pero no es a los niños, sino a los padres, ¿no?
Herodes debería llevarse a los padres a un centro de reeducación... :(
Qué bonita experiencia, me la apunto para más adelante, (interesante que en agosto haya una observación en Segóbriga,mmmm...)
Te mando un correo sobre una exposición que se va a celebrar en la Catedral de Toledo, por si te interesa o te apetece venir, sin compromiso, claro.
Un abrazo
Ostras, no se "va a celebrar", ya está en marcha desde el 25 de junio... Si esss queee...
Joer, qué diferencia entre la inmensidad del espacio y la pequeñez de esos padres maleducados que no sabes frenar o por lo menos irse con sus pequeños monstruos.
Posodo: Jajajajajaja, qué gracioso eres.
Y, sí, en realidad mi pero no era tanto para los niños como para los padres. Comprendo que quieran llevarlos a estos eventos, e incluso me parece una buena idea (así les enseñan que existe otro mundo más allá de las videoconsolas y la tele), pero, caray, tendrán que hacerse cargo de ellos y de su comportamiento, ¿no?
Alawen: Tengo un compañero que dice (si estaremos quemados) que para tener un hijo primero el Estado tendría que otorgar un carnet de padre (después de pasar un examen, supongo).
Y, sí, fue una actividad muy bonita. En principio, tenía pensado para ese sábado por la noche ir a escuchar un concierto en Pedraza a la luz de las velas (creo que iluminan todo el pueblo sólo con velas y es precioso -bueno, el pueblo ya lo es de por sí-), pero al final me enteré de esta observación astronómica el viernes y no lo dudé. Nada se interpone entre un telescopio y yo, jajajaja. He echado un vistazo a la observación que dices en Segobriba, lástima que sea en Agosto y ya no estaré por aquí. Eso sí, he visto que también hay conciertos en el teatro romano de Segóbriga los sábados por la noche. Veré si me animo.
Respecto a la exposición de los códices en la catedral de Toledo, gracias. He seguido el enlace que me has mandado y me apunto la visita.
Miguel: Hay padres muy tranquilones, sí. No se dan cuenta de que no les están haciendo ningún favor a sus hijos. Al final, todos tenemos que vivir juntos y hay que soportarse, pero estos niños de hoy...
Saludos, amigos.
Error: perdón, se me fue el dedillo en el primer Segóbriga y lo escribí mal, además de que se me cayó la tilde. Sorry.
Lo suyo sería que el Parque Arqueológico de Carranque pusiera una guardería. Respecto a Pedraza (Segovia), te doy la razón, es un pueblo realmente precioso, con velas y sin ellas.
Se come de puta madre, por cierto.
Bate: Lo de la guardería sería una buena idea, pero, ¡por favor!, que se olviden de los profes para guardarla ;-)
Estuve en Pedraza hace algún tiempo y me encantó. Y, efectivamente, comí de miedo.
Hola, SCid: que envidia, sana. Un buen reportaje, el que hiciste, Herodes incluido. Y me encanta ese detalle tan tuyo de... me inspiró la ambientación para un relato... que por desgracia he olvidado.
Muchos saludos, y a pasarlo bien
Debe hacer fácil veinte años desde la última vez que fui al Planetario, el único lugar por estos lares donde se pueden hacer observaciones de ese tipo, ¡qué ganas me dieron! (lamentablemente los romanos no llegaron tan al sur, snif, sino sería completa la cosa). Preciosas las fotos, y transmites muy bien la maravilla de la experiencia.
Con respecto a los niños, cuando estoy en ese tipo de situaciones, no puedo evitar sentir vergüenza ajena, solo por el hecho de ser madre. Se ve que los padres en todas las latitudes son parecidos, porque por aquí suelen pasar esas cosas también.
Un saludo grande, es bueno estar de vuelta :)
José Antonio: Me alegro de que te gustara, pero seguramente te habría gustado mucho más mirar tú mismo por el telescopio. Si te atraen estas cosas, echa un vistazo a las webs de algunas asociaciones astronómicas y seguro que encuentras alguna observación que te quede cerca. Te recomiendo la experiencia.
Ana Laura: Bueno, pero para poder ver un buen teatro romano o cientos de miles de millones de trillones de etc., etc., etc. de restos romanos no tienes más que venir a visitarno. Aquí no puedes dar una patada a una piedra sin encontrar debajo algún resto romano. Vente para acá y te las enseñaremos con mucho gusto ;-)
Respecto a los niños: se comportan como sus padres les permiten que lo hagan y desde luego en España cada día son más permisivos. Pensé que era cosa nuestra, pero por lo que cuentas veo que es un virus que ha ido extendiéndose por el planeta... ¡Qué pena!
Ah, y, por supuesto, bienvenida. Sí que es bueno tenerte de vuelta. Pasé por tu casa y leí tu "Herejía", tengo cositas que decir y alguna anécdota que contar al respecto. Me verás por allí pronto.
Saludos, amigos.
Publicar un comentario