Apaños culinarios
Nota: se recomienda fervientemente que los amigos valencianos se abstengan de leer esta entrada.
Suelo aprovechar los fines de semana para cocinar a lo bestia y llenar el congelador de raciones que me eviten tener que preocuparme por el qué como hoy a lo largo de la semana, así que ayer, sin ir más lejos, preparé cocido como para un regimiento. Esta mañana, he apartado una ración, con su sopita, que aún quedaba, y un par de raciones más que he transformado en ropavieja -srulup, ¡cómo me gusta!-. Además, aprovechando que me ponía a freír tomate para la ropavieja, he cocinado un par de raciones de carne picada para mezclarla con espagueti. Todo lo cual me provee de 5 raciones de comida que iré consumiendo en las próximas semanas.
Y ya que estaba dándole a las cazuelas, he preparado un extraño arroz (nótese que evito el uso de la palabra paella) para comer hoy. Con su cebolla, tomate, judías verdes (no pimiento), chirlas, tentaculillos de sepia yyyyyyyyyyyyy un poquito del pollo, morcilla y chorizo del cocido que había picado para hacer la ropavieja.
Ante tamaña blasfemia culinaria, en mi descargo diré que, antes de probarlo, lo he mirado con un poquito de repelús, pero el apaño me permitía preparar una comida más, la de hoy, sin mucho trabajo extra. Y como supongo que, obedientes a mi advertencia inicial, ningún valenciano habrá llegado hasta aquí, admitiré en voz bajita que me ha gustado: sabía un poco raro..., pero estaba rico (o yo muy harta de cocinar)
5 comentarios:
Ummmm.. ya decía yo que olía raro... jajajaja...
¡Que aproveche! ;-)
Lo del arroz de hoy no sé, la verdad. Aunque si le pones un nombre suficientemente largo quizá te compre la idea algún cocinero de la modernez... :-)
De lo que sí doy fe es de que el cocido de ayer estaba muy, muy sabroso, ya que tuve el honor de ser invitada a degustarlo...
Saludos.
¿La advertencia inicial es por cierto temor de que esos amigos valencianos dejen de ser... valencianos?
Lo primero que hicimos en mi familia al emigrar a Valencia, fue cambiarle el nombre a lo que hasta entonces llamábamos "paella"; un plato que pasó a denominarse "arroz del nuestro". Hasta hoy.
Seguro que a S. Cid se le ocurren mil nombres para su Arroz Campeador ;-)
Pantera: ¿Pero bien? ;-)
MGae: ¡A que sí! Srulup. Qué rico :-)
Posodo: No me engañas: has hecho caso omiso a la advertencia inicial :-p
Urumo: Es que hay que ser muy cuidadosos con los valencianos y lo que cualquiera, fuera de allí, llama paella, jajaja. En cualquier caso, tú sí que tienes imaginación para ponerle nombre a las cosas, jaja. Aceptado: Arroz Campeador.
Saludos, amigos.
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